Es un día, que para no variar, tengo trabajo para dar y regalar, pero ante mi filosofía “tengo tanto que hacer que no se por donde comenzar”, me tomaré unos minutos para jugar con mi blog. He decidido cambiar la imagen, no más fondo obscuro y contrastante, ahora fondo blanco que genere un ambiente limpio para que fluyan las ideas y los tejidos.
Como alguna vez comenté, entre otras cosas tengo pendiente mi participación como coautora de un capítulo en un libro… bueno, de divulgación científica (hubiera preferido decir en una novela, un compendio de cuentos, pero ni modo). Justo ayer una de mis compañeras de proyecto me envió el texto final con la leyenda “ahí le das una checadita”, que en nuestro argot significa: revísalo porque yo no tuve tiempo.
En el proceso de la checadita hice algunos cambios en la “forma”, cambié viñetas, separé párrafos o los uní, eso fue todo. En el correo de regreso anoté: ahí te adjunto el texto, solo hice unos cambios mínimos en la forma.
Hoy hice unos cambios en éste blog, la forma es justo la misma, lo que cambió fue el fondo, de negro a blanco… pero en el contexto anterior ello hubiera significado que cambié de temática, intenciones, filosofía, pero no, sólo cambie de color… tengo contacto con personas cuyas lenguas maternas son el inglés, el turco, farsi… y la broma de siempre es ¿qué no hablamos el mismo idioma? Ahora me doy cuenta de algo: entre los que hablamos español, tampoco hablamos el mismo idioma, que alguien me explique!!!
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